El restaurante Casa Vigil, ubicado en la bodega El Enemigo de Mendoza, Argentina, ha logrado destacarse en la creciente escena gastronómica de la región. El chef Iván, pieza clave de este restaurante, compartió recientemente sus reflexiones sobre el crecimiento de Casa Vigil, desde sus inicios hasta su posición actual como un reconocido destino gastronómico.
Casa Vigil fue fundada dentro de la bodega El Enemigo, propiedad del reconocido enólogo Alejandro Vigil y Adriana Catena, hija del icónico Nicolás Catena. La idea original surgió de un concepto íntimo: Alejandro preparaba sándwiches y platos sencillos para acompañar sus catas de vino. Este enfoque humilde se transformó rápidamente en un restaurante de alta cocina que ofrece un menú de degustación completo, combinado con el extenso portafolio de vinos de El Enemigo. Iván, originario de Buenos Aires, tiene una gran experiencia en la industria gastronómica. Antes de unirse a Casa Vigil, trabajó en prestigiosos lugares como Cabas Wine Lodge y Hotel Fierro en Buenos Aires, donde cultivó su pasión por la comida asiática, un gusto que se refleja en sus creaciones actuales. Esta diversidad culinaria se fusiona con los sabores locales, creando una experiencia única en cada plato que sirve en Casa Vigil.
Mendoza: epicentro de la enogastronomía
Mendoza ha experimentado un notable auge en su escena gastronómica en los últimos cinco o seis años, gracias a la perfecta combinación entre vitivinicultura y gastronomía. Este fenómeno, conocido como enogastronomía, ha permitido que los restaurantes locales se desarrollen en conjunto con las bodegas, ofreciendo maridajes precisos para los numerosos vinos de la región. La visión de Iván refleja esta integración, enfatizando la importancia de los restaurantes en la escena vitivinícola mundial de Mendoza.
Un plato emblemático y pasión por la sencillez
Entre las creaciones de Iván se destaca su plato de trucha con crema de azafrán, ostras y membrillo. Esta combinación no solo resalta los productos locales, como el azafrán de Mendoza, sino que también representa su enfoque culinario: el respeto por los ingredientes y su preparación simple pero sofisticada. Su afinidad por los vinos blancos, especialmente los Chardonnay de El Enemigo, complementa su cocina y resalta la importancia del maridaje en la experiencia en Casa Vigil.
Una nueva definición de alta cocina
Casa Vigil ofrece una nueva perspectiva de la alta cocina, combinando los protocolos de servicio tradicionales con un ambiente relajado y acogedor. La hospitalidad y la sensación de estar en casa son fundamentales en la experiencia que Iván y su equipo brindan a sus comensales. Este enfoque permite a los visitantes disfrutar de la alta cocina sin las estrictas formalidades del pasado, haciendo que la experiencia sea más accesible y personal.
Casa Vigil representa la evolución de la alta gastronomía en Mendoza, fusionando comida, vino y hospitalidad en un entorno único. La dedicación de Iván a su arte culinario y su pasión por la región son palpables en cada detalle, haciendo de Casa Vigil un destino imperdible para los amantes de la comida y el vino.
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